La preparación biomecánica es una etapa crucial del tratamiento endodóntico, encargada de dar forma, limpiar y descontaminar los conductos radiculares para su posterior obturación. Sin embargo, hacer que esta preparación sea ideal siempre es un desafío, especialmente en anatomías complejas,
donde exista riesgo de desviación del cauce original. Durante años, esta preparación se realizó a expensas de instrumentos de acero inoxidable, que por ser rígidos presentan un mayor riesgo de provocar desviaciones y transposición del foramen apical. Además, requieren el uso adicional de fresas de preparación cervical, que permiten una mayor remoción de dentina, con una menor longevidad dentaria.
En este contexto, los instrumentos de níquel-titanio (NiTi) aportaron un nuevo enfoque a las preparaciones endodónticas. Por ser más flexibles se adaptan a conformaciones complejas.
del conducto radicular, consiguiendo un modelado más efectivo, seguro, anatómico y ágil, con menor estrés profesional y mayor confort para el paciente.
